La ciudad más grande de China, Shanghái, anunció este lunes las primeras muertes por Covid-19 desde el inicio de un prolongado confinamiento debido al peor brote de la enfermedad en el país desde el inicio de la pandemia, medida que ha generado críticas y protestas. Los fallecidos son tres: dos mujeres, de 89 y 91 años respectivamente, y un hombre de 91, según el gobierno local, que indicó que todas las víctimas padecían problemas de salud como enfermedad coronaria, diabetes y presión alta.
“Las tres personas se deterioraron después de ingresar al hospital y murieron luego de que los esfuerzos por revivirlos resultaran inefectivos”, aseguró el ayuntamiento. Shanghái, de 25 millones de habitantes, reportó el lunes 22 mil 248 nuevos casos locales, de los cuales 2 mil 417 eran sintomáticos, según la comisión municipal de Salud. Y aunque el nivel de contagios es relativamente bajo comparado con otros brotes en el mundo, pero refleja una tendencia de las últimas semanas, con decenas de miles de casos diarios. Aún así, las autoridades insistieron en mantener la política de cero tolerancia ante el virus, con restricciones de movilización y aislamiento de las personas contagiadas, incluso si no presentan síntomas.
Los pobladores de Shanghái han manifestado inconformidad con las restricciones por la falta de alimento, las condiciones inadecuadas en los centros de cuarentena y la drástica aplicación de las medidas. Sin embargo, el Ministerio de Salud de China señala que relajar demasiado las restricciones podría saturar el sistema sanitario y provocar millones de muertes, y también porque la tasa de vacunación sigue siendo baja entre las personas mayores: solo algo más de la mitad de los mayores de 80 años han recibido una dosis de refuerzo.
También te puede interesar: Vacunados con Sputnik V pueden recibir cuarta dosis para viajar
Año sensible
El Partido Comunista Chino (PCC) está utilizando el bajo número de muertos como argumento político, demostrando que pone la vida de su pueblo por encima de las consideraciones económicas, en contraste con las democracias occidentales donde el coronavirus se ha cobrado innumerables vidas. Pero las consideraciones políticas también están en juego, según muchos expertos.
El PCC celebrará una importante reunión a finales de 2022 en la que se espera que el presidente de China, Xi Jinping, obtenga un tercer mandato de cinco años al frente del partido. “Este es un año sensible y crucial para el régimen”, dice Lynette Ong, profesora de ciencias políticas de la Universidad de Toronto (Canadá).
Las autoridades chinas solo han notificado 4 mil 641 muertes oficiales relacionadas con el Covid-19 desde el inicio de la pandemia, a finales de 2019, una cifra extremadamente baja teniendo en cuenta que China es el país más poblado del mundo (1 mil 400 millones de habitantes).
*Con información de AFP