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El encuentro entre las selecciones de Guatemala y Argentina, celebrado en el FedEx Field de Washington, quedará registrado en la historia del fútbol guatemalteco por un gol inesperado que sorprendió a propios y extraños. Este gol, ocurrido en el minuto cuatro del tiempo regular, fue el resultado de una desafortunada serie de eventos que culminaron en un autogol del defensor argentino Lisandro Martínez.

Todo comenzó con un centro por la banda derecha del equipo guatemalteco. Óscar Santis, logró enviar un centro peligroso al área argentina. Rubio Rubín, delantero de Guatemala, intentó conectar con el balón, pero no logró desviarlo de manera efectiva. Esto provocó que el balón llegara hasta el arquero argentino Emiliano ‘Dibu’ Martínez, quien, en un intento por despejar el peligro, rechazó el balón de manera imperfecta.

Guatemala le anotó a Argentina

El rechazo del ‘Dibu’ Martínez impactó en Nahuel Molina, y en el intento por despejar el balón, Lisandro Martínez, de manera desafortunada, terminó introduciéndolo en su propia portería. El gol fue atribuido como autogol a Lisandro Martínez, marcando así un inusual pero significativo hito en la historia del fútbol guatemalteco.

Este gol tiene un significado especial para Guatemala por varias razones. En primer lugar, es la primera vez en la historia que Guatemala logra anotar un gol contra Argentina en partidos amistosos. Aunque se trate de un autogol, este evento es simbólico y refleja un momento de gran relevancia para el fútbol guatemalteco.

Históricamente, las selecciones de Guatemala y Argentina han tenido pocos enfrentamientos, y en aquellos encuentros, Argentina ha demostrado una clara superioridad. El gol anotado en este partido, aunque fortuito, representa un pequeño triunfo para Guatemala, elevando el ánimo y la moral de los jugadores y aficionados guatemaltecos.