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El Comité Olímpico Guatemalteco (COG) ha sido el epicentro de un complejo y candente conflicto que ha sacudido los cimientos del deporte en Guatemala. El pasado 16 de marzo, una reunión en la sede de la Confederación Deportiva Autónoma de Guatemala (CDAG) desencadenó una serie de eventos que han puesto en entredicho la estabilidad y la legalidad de las instituciones deportivas en el país. Este incidente, lejos de resolver disputas internas, ha exacerbado las tensiones y ha generado un debate profundo sobre la legitimidad de las acciones tomadas por los diferentes actores involucrados.

El punto focal de este conflicto se centra en la figura de Jorge Rodas, quien hasta entonces se desempeñaba como presidente del COG. La reunión del 16 de marzo marcó un punto de inflexión, ya que durante la misma, un grupo de dirigentes deportivos desconoció a Rodas y a su comité ejecutivo. Este acto, lejos de ser una solución consensuada, ha desencadenado una serie de disputas legales y administrativas que han sumido al COG en una crisis sin precedentes.

Jorge Rodas quiere seguir en el poder

El comité ejecutivo liderado por Rodas ha reaccionado ante la resolución del pasado 16 de marzo, emitiendo un comunicado en el que rechaza categóricamente el desconocimiento de su liderazgo. El comunicado enfatiza la legitimidad del comité ejecutivo y su derecho a permanecer en sus cargos, respaldados por una sentencia de amparo ejecutoriada y ejecutada. Este documento, además de rechazar la validez de la reunión del 16 de marzo, plantea una serie de argumentos legales y administrativos destinados a refutar las decisiones tomadas en dicha reunión.

Uno de los principales puntos de conflicto gira en torno a la legalidad de la convocatoria y celebración de la reunión del 16 de marzo. Según el comunicado del comité ejecutivo, dicha reunión no cumplió con los requisitos establecidos por la Ley para el Desarrollo de la Cultura Física y del Deporte para ser considerada una Asamblea General del COG. Se argumenta que la convocatoria fue irregular y que no fue realizada por el comité ejecutivo, único ente con la facultad de hacerlo según la legislación vigente. Además, se cuestiona la legitimidad de las firmas y la falta de notificación adecuada a los miembros del comité ejecutivo, lo que pone en duda la legalidad del proceso.

Otro aspecto crucial del conflicto es la disputa sobre la legitimidad de las decisiones tomadas durante la reunión del 16 de marzo. El comunicado del comité ejecutivo desafía cada punto de las decisiones tomadas en dicha reunión, desde la denuncia de una presunta carta falsa hasta la ilegitimidad de la anulación de elecciones y la imposición de sanciones por un comité de ética cuya creación se considera ilegal. En este sentido, el comité ejecutivo argumenta que las decisiones tomadas contravienen sentencias de amparo y resoluciones judiciales previas que no han sido impugnadas, lo que añade un nivel adicional de complejidad a la situación.

Además de las disputas legales y administrativas, el comunicado también señala posibles acciones que podrían poner en riesgo los fondos públicos del COG, así como la integridad de las investigaciones en curso. Se plantea la preocupación de que ciertas acciones podrían conducir a irregularidades financieras y a la obstrucción de la justicia, lo que pondría en peligro la estabilidad financiera y la reputación del COG.

https://twitter.com/COGuatemalteco/status/1769916366398603405

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José Manuel Contreras, «Moyo», ha estado ausente en las últimas jornadas debido a una lesión. . . #LigaNacional #FutbolNacional #Moyo #JoseManuelContreras #Comunicaciones #Cremas

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