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El empate del PSG ante el Clermont en Ligue 1 dejó un momento llamativo en la conferencia de prensa posterior. Luis Enrique, técnico de los parisinos, mostró su molestia con el estado del terreno de juego en el que se disputó el duelo previo a su vuelta a la Champions, ya que en cuatro días visitarán al Newcastle.

«Los partidos fuera de casa son siempre difíciles, con rivales motivados, el público, la atmósfera, todo eso marca la diferencia, y contra el Newcastle es un partido que suscita mucho interés, será un mejor partido», vaticinó el técnico español del PSG, quien también lamentó el estado del terreno de juego. «El balón se parecía más a un conejo que saltaba, no logramos cazar al conejo», señaló.

Las ‘Urracas’, que este sábado encadenaron una tercera victoria consecutiva en Premier League al derrotar al Burnley (2-0), esperan con el pico afilado al PSG en el torneo más prestigioso de la escena europea; este duelo será importante en las aspiraciones de ambos clubes dentro de la Champions y se prevé pocas quejas por parte de Luis Enrique acerca del terreno de juego.

El nuevo tridente del PSG sigue sin arrancar

El rearmado ataque del PSG deja ver que el tridente Mbappé – Kolo Muani – Dembélé parece estar aún en obras. Especialmente porque Mbappé, lastrado por pequeños problemas físicos desde el inicio de la temporada, no estuvo a su mejor nivel, aunque llegó a estrellar un pase de Dembélé en el exterior del poste.

El astro francés recibió incluso una tarjeta amarilla por simular un penal (81). Después de ingresar al terreno de juego en el segundo tiempo, Gonçalo Ramos perdonó a dos metros de la línea de gol la ocasión más clara del partido ante el arquero Mory Diaw (82).

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