Imane Khelif muestra un espectacular cambio de imagen, días después de ganar el oro en los Juegos Olímpicos de Paris2024 .
La boxeadora argelina fue empujada a una confrontación global sobre identidad de género y regulaciones en el deporte tras su primera pelea en París.
Su rival italiana Angela Carini se retiró después de apenas unos segundos de combate, citando el dolor por los golpes iniciales.
Soutien à l’immense boxeuse Imane Khelif Face à l’ignoble déballage sur son identité et sa vie privée.
Maintenant que les preuves leur ont cloué le bec, les instigateurs de cette raciste et honteuse chasse à la femme lui doivent de fermes excuses. pic.twitter.com/6uagb3Pq8c
— Sébastien DELOGU (@sebastiendelogu) August 3, 2024
Semanas después, decide posar con sus guantes de boxeo, su medalla de oro y con una renovada imagen para un centro de belleza que la ve como una «bella mujer» más allá de la apariencia.
«Para conseguir su medalla, no necesitó perder el tiempo en salones de belleza o de compras. Nunca sintió la necesidad de ajustarse a esos estándares para demostrar su presencia», escribió Beauty Code.
Y añadieron: «Iman, al cambiar su apariencia, no buscó cambiarla para encajar en los moldes en los que el mundo quiere atraparnos».
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Regreso de la boxeadora
Tras la polémica, Imane Khelif interpuso una denuncia en París por «ciberacoso agravado», que su abogado, Nabil Boudi, espera que determine quién inició la «campaña misógina, racista y sexista».
La Fiscalía de París abrió una investigación para determinar si los actos dirigidos constituyen delitos de ciberacoso motivado por el género, insultos públicos debido a su género, provocación a la discriminación y difamación pública por su origen.
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En Argelia es considerada una «heroína», fue recibida y condecorada con la medalla de la Orden del Mérito por el presidente, Abdelmadjid Tebboune, junto a la gimnasta Kaylia Nemour y el corredor Djamel Sjati.
Ella había sido descalificada del campeonato mundial del año pasado por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) al no pasar una dudosa prueba de elegibilidad para las competencias femeninas.
En 2023, el COI tomó la medida sin precedentes de prohibir permanentemente a la IBA en los Juegos Olímpicos, después de años de preocupaciones sobre su gobernanza, equidad competitiva y transparencia financiera.
