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En un enfrentamiento que marcará la jornada, el Werder Bremen sorprendió al Bayern Munich al imponerse con un marcador de 0-1, logrando su primera victoria sobre el gigante bávaro desde 2008. Este resultado no solo representa un golpe a la moral del Bayern, sino que también amplía la brecha en la tabla de la Bundesliga, dejándolos a siete puntos del líder, Bayer Leverkusen.

Desde el inicio del encuentro, el Werder Bremen desplegó una defensa sólida, cerrando espacios y creando complicaciones para que el Bayern llegara al área. A lo largo del primer tiempo, el equipo de Múnich solo logró generar una ocasión clara, en el minuto 28, con un remate de Dayot Upamecano que fue salvado por el arquero Ketterer.

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Bayern pierde y el Leverkusen es líder solitario

Mientras defendía con solidez, el Bremen buscaba oportunidades de contragolpe, destacando la velocidad de Njinmah, quien incluso marcó en el minuto 25, pero el gol fue anulado tras la revisión del VAR por una falta previa contra Jamal Musiala.

El segundo tiempo continuó en la misma dinámica, y a pesar de un intento temprano del Bayern con un remate de Kane desde fuera del área en el minuto 50, fue el Werder Bremen quien tomó la delantera en el minuto 60 con un gol de Weiser.

Ante la desventaja, el entrenador del Bayern, Thomas Tuchel, realizó cambios ofensivos sacando a Guerreiro, Kimmich y Davies, e introduciendo a Müller, Tel y Goretzka. Esto dejó al Bayern con tres defensas y Goretzka como único volante de contención, volcando el juego hacia la mitad contraria.

A pesar de los esfuerzos finales del Bayern, con un remate de Leroy Sané manoteado por Ketterer en el minuto 78 y un cabezazo de Tel que impactó en el poste en el minuto 84, no lograron cambiar el resultado.

La derrota deja al Bayern Munich con la tarea de reducir la distancia en la tabla, con un partido menos y la oportunidad de recortar la brecha a cuatro puntos enfrentando al Union Berlín el miércoles. Sin embargo, el partido contra el Werder Bremen subraya que en esta temporada, el Bayern está lejos de ser imbatible, y los rivales han aprendido cómo plantar cara al equipo dirigido por Tuchel.