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Este martes se dio a conocer por parte del Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que el capitán del Real Madrid, Nacho, ha sido suspendido tres partidos por su expulsión del pasado fin de semana y ahora dejará mermada a la plantilla merengue tras confirmarse que no estará para el Clásico del 28 de octubre.

La sanción surge como consecuencia de la tarjeta roja que Nacho recibió el pasado fin de semana durante el enfrentamiento entre el Real Madrid y el Girona. En un lance del juego, el canterano madridista propinó una entrada contundente a Portu, lo que le impidió a este último completar el encuentro debido al fuerte golpe, a pesar de que el duelo estaba en su fase de descuento.

El Comité de Competición, en su resolución emitida este martes, indicó que Nacho fue suspendido por «emplear juego peligroso causando daño que merme las facultades del ofendido». Cabe destacar que originalmente, el árbitro solo había mostrado una tarjeta amarilla, pero la intervención del VAR llevó a una rectificación y la expulsión del jugador. Según informó el Girona, la entrada resultó en un edema óseo en el maléolo tibial del tobillo derecho de Portu y una rotura muscular en la parte izquierda del glúteo.

Nacho, una baja significativa

La ausencia de Nacho no solo repercutirá en el Clásico ante el Barcelona, sino también en los encuentros contra Osasuna el 7 de octubre y la visita a Sevilla el 21 de octubre. Esta baja es significativa para el conjunto merengue, que prácticamente solo cuenta con Antonio Rüdiger como único central disponible en la plantilla. La defensa del Real Madrid se ve así desafiada con la pérdida de su capitán en estos cruciales encuentros de la competición liguera.

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