En el 2010, Paul Walker reveló que su amistad con Vin Diesel habría sobrepasado a la vida real. Ambos actores se conocieron en las cintas de «Rápidos y Furiosos«, tras su amor por los carros de carreras y la actuación, forjaron una extraordinaria amistad.
Walker falleció en un accidente automovilístico en 2013. La imagen de la pequeña Meadow llorando, hija del famoso, estrujó a todos. Vin Diesel, su amigo, se convirtió entonces en el tutor legal de ella.
Contrae matrimonio
Ocho años después de la tragedia, Meadow contrajo matrimonio y Diesel fue el responsable de entregarla simbólicamente en la ceremonia.
En su cuenta de Instagram, la hija de Paul Walker compartió una fotografía de ambos caminando cerca del mar y el comentario «ayoooooo». Inmediatamente famosos como Gal Gadot comentaron la publicación.
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Vin Diesel compartió un dibujo de su perfil y el rostro de Walker, aclarando que se trataba del trabajo de un fan.
«Todo amor, siempre», escribió el histrión.
Walker tenía 40 años y dejaba huérfana a Meadow, fruto de una breve relación con Rebecca McBrain. Aunque la pequeña había pasado los primeros años de su vida con su madre, en 2011 se había mudado a California para hacerlo con su padre, que tenía la custodia total de la pequeña.
El actor era un padre entregado a su hija, que firmaba sus contratos y planificaba su agenda alrededor de la vida de la pequeña; por ejemplo, siempre exigía no rodar en verano, cuando la pequeña tenía vacaciones.
Cuando Paul falleció, en lo que puede resultar un gesto inesperado en un mundo que a menudo parece tan superficial como el del cine, fue el actor Vin Diesel quien pasó a ser su tutor, su padrino. La pequeña creció rodeada del coprotagonista de la saga de películas y de su familia.
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